Con la llegada del invierno, el frío y los cambios constantes y bruscos de temperatura entre el exterior y el interior son los causantes más frecuentes del dolor e irritación de garganta. Así mismo, el uso de la calefacción acaba resecando el ambiente y el aire seco puede favorecer la irritación de la garganta y, por ende, la aparición de dolor en la misma.

En estos períodos, es muy importante proteger la garganta del frío para evitar que todas estas condiciones afecten tu salud y deriven en problemas más graves como faringitis, laringitis, alteraciones de la voz, etc. A continuación, te explicamos cómo cuidar la garganta del frío con unas sencillas medidas que puedes llevar a cabo en tu día a día.

Claves para proteger la garganta del frío

La mejor opción para prevenir la irritación o el dolor de garganta es seguir una serie de cuidados y hábitos que pueden ayudarte a evitar este problema durante el invierno:

  • Bebe abundante agua y líquidos, ya que humedecen las mucosas de la garganta, la mantienen hidratada y la protegen de infecciones.
  • Lleva una dieta sana y equilibrada rica en vitaminas y minerales. Esto es esencial para que tu sistema inmune esté fuerte y en perfectas condiciones para luchar contra agentes patógenos capaces de causar daños en tu garganta.
  • Intenta descansar mínimo 8 horas al día y no forzar la voz ni gritar para evitar irritar tu garganta.
  • Fumar cuando el clima es frío aumenta las posibilidades de que aparezca dolor e irritación de garganta, pues el humo del tabaco, así como otras sustancias ambientales perjudiciales, aumentan el riesgo de sufrir este problema.
  • Lava bien tus manos frecuentemente para evitar contagios y procura mantener una buena higiene en todo momento, por ejemplo, usa un pañuelo cuando estornudes o tosas y evita compartir tus objetos personales o tu ropa si te encuentras resfriado.
  • Es muy importante que te abrigues cuando vayas a salir a la calle. Cubre el cuello con una buena bufanda o pañuelo para proteger tu garganta del frío.
  • Evita los cambios bruscos de temperatura. No salgas a la calle directamente después de haber estado en un sitio donde el clima estaba muy cálido. Esta es una de las principales causas por las que aparecen el dolor y la irritación de garganta.
  • Intenta no exponerte a situaciones donde el aire frío pueda dañar tu garganta, ir en moto, por ejemplo, y si por cualquier circunstancia tienes que hacerlo, no olvides abrigarte bien y tapar tu garganta.
  • Evita las corrientes de aire frío, especialmente a la hora de dormir. Si hay una ventana delante de tu cama, comprueba que esté bien cerrada, ya que por las noches refresca más y las posibilidades de que tu garganta se irrite aumentan.
  • Si estás en un ambiente cálido y sientes que tienes calor o estás sudando, no te expongas directamente al frío, sitúate en un sitio alejado del calor pero que no haga frío y espera a que el sudor y el calor desaparezcan.

¿Qué hacer si tenemos dolor o irritación de garganta?

En ocasiones, a pesar de seguir todos los pasos para proteger la garganta del frío, es posible que el dolor o la irritación aparezcan, y en esos casos, puedes optar por un medicamento que ayude a tratar las molestias. La gama de Strepsils pastillas para chupar disponible en sabor miel y limón, fresa, menta, limón y con vitamina C, cuentan con propiedades emolientes y antisépticas que ayudan a aliviar la irritación de garganta y la suavizan rápidamente en adultos y niños a partir de 6 años. Además, dispones de Strepsils con lidocaína pastillas para chupar, que gracias a sus propiedades analgésicas y antisépticas, proporcionan alivio local sintomático de las infecciones leves de boca y garganta que cursan con dolor y sin fiebre, a partir de 12 años. Lee las instrucciones de estos medicamentos y consulta al farmacéutico. Strepsils es un medicamento de Reckitt Benckiser Healthcare, S.A.

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Ahora que ya sabes cómo puedes prevenir y aliviar este problema, puedes ponerlo en práctica siempre y cuando solo sufras dolor o irritación de garganta. Si además de estos dos síntomas, presentas pus o sangre en la garganta o tienes fiebre, no dudes en visitar a un médico, ya que podría tratarse de una infección más severa. Así mismo, si las molestias no disminuyen, consulta a tu médico también para que te examine y te administre algún tratamiento que alivie e elimine tus síntomas lo más rápido posible.